Ahora ("y siempre") dicen que hay provincias que no están preparadas para votar.
Que lo que pasa es que sus habitantes son pasibles de "clientelismos".
Claro, como son pobres.
Tiene gracia, porque eso podría a`aplicarse a todo.
Por ejemplo, las grandes cadenas, cuando ofrecen esas promociones tan truchas de 3x2, o descuentos según cuando sea con las tarjetas de tal o cual banco, para que compres...
¿no practican el clientelismo con sus clientes?
Usté se escandaliza seguro con lo que le digo, no es lo mismo. Pero mire le digo yo, usté tiene que comprar zanagorias y latas de semillas de peteribí. Va caminado por la calle de su barrio, una de esas anchas, y ve un cartel de un super que le dice "si me compra a mí las zanagorias y las semillas, le doy esto, aquello y lo otro".
Con lo cual a usté le hacen lío delante de la cara, lo marean, y le hacen creer que le dan el mundo a cambio de que usté los elija a ellos para comprarles las zanahorias que si usté mira bien le salen carísimas.
O los bancos, que le gritan "bajá la aplicación" o "voy a viajar a tu fondo de pantalla", porque el banco le da "muchas cosas" a cambio de su plata.
Si usté tiene cuenta en esos bancos, USTÉ NO ESTÁ PREPARADO PARA VOTAR NI PARA TENER PLATA.
Pero a nadie de esta dictadura se le ocurriría sacársela, por el contrario, esta dictadura se pasa el tiempo tratando de cuidarlo de esos mafiosos Ultra C(lientelistas), y que usté pueda seguir puteándola en libertad mientras nos grita desde su bobería, como diría Máximo.
Usté por ejemplo que lo ve al zángano decir "pobreza cero", o "un millón de créditos hipotecarios", que en los años que lleva a cargo de una ciudá con un banco que NO DIO CRÉDITOS HIPOTECARIOS NI PARA ALQUILERES, que la cubrió de globos y de Raviolettas Shankares pagados con deuda externa, y le cuenta actos casi admininistrativos, de organización del tránsito como metrobuses y bicisendas como si fueran Grandes Obras, de manera tal de justificar los millones y millones que costaron y que ahora descansan después de jornadas agotadoras en fiscalmente paradisíacos cuentas del HSBC, que también deben ser el fondo de pantalla de unos cuantos.
Usté que NO QUIERE que deje de haber pobres Porque Dios Así Lo Quiso y por eso lleva años votando al mentiroso, ahora lo ve prometiéndoles cosas ¿usté qué piensa de eso, mejor dicho, qué siente -porque pensar es mucho riesgo ya se sabe, por eso usté se mueve con los intestinos que tienen su propio sistema nervioso autónomo acabo de enterarme, qué curioso, enterarse de lo "entero" que es lo del intestino-, qué siente, le pregunto? ¿No será que "son todos clientelistas"?
Usté, que vive de sus negocios, vive de sus clientes.
Usté, que vive de un salario, vive de los clientes de su patrón.
Y los empleados públicos, según usté, viven del clientelismo de los que no saben votar.
Afloje un poco.
Escuche a la jefa, que ayer como nunca habló de la felicidad y de su correlato proporcional a "hechos".
Cuando dijo "cuando se preguntan qué es el proyecto", señalando con la cabeza hacia las instalaciones de la nueva Universidad en Río Gallegos dijo quedamente "eso es el proyecto".
Y como le dije, habló de felicidad, de que de eso se trata la vida.
Mire un poco: el país, "la Argentina", nunca fue ese país que usté creyó que fue, jamás. Nunca fue ese lugar "argentino", de plata. Sólo para esos de las fiestas que hablan de tú en las películas en blanco y negro.
Y ahora no es ese infierno que usté cree que es. Piense un poco, viejo. Piense que cada vez que a usté lo azuzan contra algo "que se da" es que lo están usando. Porque "eso que se da", por un lado le vuelve a usté, en compras en su kiosko o en la concesionaria de autos de su patrón o en la peluquería de su mujer. En cambio si no se da "para honrar nuestras deudas" con gigantescos usureros que a usté le sacaron sus ahorros del banco y USTÉ SE OLVIDA y eso que pasó ayer usté está a un tris de volver a perderlo todo.
POR BOBO.
No joda más con el clientelismo. Y si lo dicen jueces, que no pagan impuestos, que no pagan nunca ninguna consecuencia de sus malos actos, pregúntese qué le pasa a las pobres personas que se ven sometidas a "la justicia" de ese juez, que distingue las capacidades de unos y otros "a ojo" y decide quién está preparado para ser libre y quién no.
Afloje viejo. Relájese. Sea feliz, disfrute de lo que la vida le da.
La va a extrañar a la yegua. Pero no por mucho tiempo: ya la va a ver en la tele como secretaria general de la ONU.
Y después, con el Enterprise, a liberar a la galaxia.
RH