Hace unas horas, escuché un rato de "un programa" de radio UBA, "Té de brujas", en el cual una patota de seudocentes emitía risotadas sobre la nueva forma de evaluar en la PBA.
Lo digo claramente: antes del programa, no sabía nada del tema.
Después de haber escuchado el programa supe mucho menos.
Sólo sé mucho más de la toxicidad de gran parte de aquellos a quienes se pone delante de un micrófono.
Lo único que oí, fueron descalificaciones -se llegó a citar a la cueva de Platón - sobre algo que -falazmente- "se daba por hecho" que los oyentes conocían.
Nadie en realidad puede saber de qué se trata porque ningún medio dio información precisa sobre la reforma, y los que hubieran dado alguna, quedó sepultada debajo de las mentiras, de las tergiversaciones.
Es como toda la campaña de acoso y derribo; el ruido tapa cualquier intercambio. Lo primero que impide ver es que ¿Cuál podría ser la razón de este Gobierno o de cualquier Gobierno para "eliminar los aplazos", "para eliminar cualquier exigencia"? ¿Es para epater les bourgeois solamente, o sea, para molestar a "la gente"? ¿No es un razonamiento de locos? ¿No es así todo lo que dicen y hacen?
Después de escuchar un rato más, te enterás que el programa era una especie de sucursal de la UCR, Alfonsín, Angel Rozas -hay que tener cara para mencionarlo-, el informe Sábato, su publicación...
Un partido que debería haberse disuelto por pura vergüenza, y la mayoría de sus dirigentes deberían estar en cana por tantos motivos que no cabrían en la guía telefónica de San Pablo.
La verdad que entre las amenazas de Barrionuevo, los que les niegan los medicamentos a los jubilados con una excusa trucha, y las campañas medíaticas de estos días, me pregunto hasta cuando va a seguir la inacción judicial.
Ojo jueces, que alguien puede salir lastimado, y no puede ser que sean siempre los mismos.
Un poquito de por favor.
Lo digo claramente: antes del programa, no sabía nada del tema.
Después de haber escuchado el programa supe mucho menos.
Sólo sé mucho más de la toxicidad de gran parte de aquellos a quienes se pone delante de un micrófono.
Lo único que oí, fueron descalificaciones -se llegó a citar a la cueva de Platón - sobre algo que -falazmente- "se daba por hecho" que los oyentes conocían.
Nadie en realidad puede saber de qué se trata porque ningún medio dio información precisa sobre la reforma, y los que hubieran dado alguna, quedó sepultada debajo de las mentiras, de las tergiversaciones.
Es como toda la campaña de acoso y derribo; el ruido tapa cualquier intercambio. Lo primero que impide ver es que ¿Cuál podría ser la razón de este Gobierno o de cualquier Gobierno para "eliminar los aplazos", "para eliminar cualquier exigencia"? ¿Es para epater les bourgeois solamente, o sea, para molestar a "la gente"? ¿No es un razonamiento de locos? ¿No es así todo lo que dicen y hacen?
Después de escuchar un rato más, te enterás que el programa era una especie de sucursal de la UCR, Alfonsín, Angel Rozas -hay que tener cara para mencionarlo-, el informe Sábato, su publicación...
Un partido que debería haberse disuelto por pura vergüenza, y la mayoría de sus dirigentes deberían estar en cana por tantos motivos que no cabrían en la guía telefónica de San Pablo.
La verdad que entre las amenazas de Barrionuevo, los que les niegan los medicamentos a los jubilados con una excusa trucha, y las campañas medíaticas de estos días, me pregunto hasta cuando va a seguir la inacción judicial.
Ojo jueces, que alguien puede salir lastimado, y no puede ser que sean siempre los mismos.
Un poquito de por favor.
RH
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